El que te mostramos a continuación es un lavabo antiguo recuperado de un barco. En las embarcaciones cada centímetro es importante y de ello da fe este lavabo que te presentamos. Con tan solo 25 centímetros de fondo, 50 centímetros de ancho y 180 centímetros de alto tenemos todo lo que necesitamos de un lavabo.
En la parte superior ofrece un espejo reclinable, además de una pequeña balda y un secreter donde poder guardar los objetos de aseo (jabón, cepillo de dientes, cuchillas de afeitar). La tapa del secreter, una vez abierta, ejerce las funciones de balda supletoria.
El lavabo, de cerámica y con un grifo que posee un curioso a la vez que práctico sistema de apertura de caudal de agua, también se puede recoger de forma que el lavabo, totalmente errado, tan solo ocupe 25 centímetros de fondo. Junto con el lavabo hay una balda plegable que funciona de forma independiente.
En la zona inferior el mueble tiene dos huecos con puerta para guardar otros útiles como las toallas y un último hueco más ancho que se puede emplear como zapatero.
En la parte trasera y oculto por el mismo mueble posee dos depósitos para el agua, uno en la parte superior y otro en la inferior. Recordemos que en muchos barcos antiguos no existían canalizaciones y el agua para lavarse se almacenaba en estos prácticos depósitos.
Sin duda, se trata de una pieza única que puedes adquirir ahora por tan solo 518€.
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