Velas de diferentes formas y colores y candelabros realizados con baldosas mexicanas. Lozano Allende Decoraciones. |
Los candelabros, por ejemplo, han pasado de ser un elemento práctico utilizado cuando aún no se conocía la luz eléctrica, a ocupar un espacio importante en la decoración. Así, junto aquellos antiguos de metal o los más lujosos de plata, encontramos ahora los realizados con diferentes materiales, tamaños o formas que encajan perfectamente en cualquier lugar de la casa: en la mesa del salón, en el cuarto de baño o en la mesita de noche.
La vela es iluminación, aunque al ser suave por tener una llama pequeña, lo mejor a la hora de colocarlas es esperar a la noche y apagar todas las luces eléctricas. Una vez realizada esta maniobra, probaremos a ir colocando velas en diferentes puntos del hogar para encontrar su ubicación más idónea. No olvides nunca que las velas pueden prender los objetos -apartarlas de cortinas u otros elementos inflamables- y que la cera gotea al derretirse -emplea un recipiente, como un plato o un portavelas, para no manchar-.
Gracias a la evolución de las técnicas para crear velas, hoy las podemos encontrar de formas, olores, colores y tamaños prácticamente infinitas. Para no perderte con tan amplia variedad, te ofrecemos unos sencillos trucos a la hora de decorar distintas estancias.
Velas con llamas de colores. Fuente: Internet. |
- El salón: utiliza velas de diferentes tamaños, aunque adecuando las mismas al lugar donde las coloques. En la mesa emplea velas redondas y de baja altura para no obstaculizar la visión de las personas a la hora de la comida o cena. Reserva las más grandes para las esquinas más oscuras o alejadas del sofá. No coloques velas altas delante del televisor y emplea las de formas más vistosas para colocarlas en lugares bien visibles como la mesa auxiliar o los muebles bajos. Los colores más recomendables son el azul, el verde o el amarillo y los olores de las mismas han de ser suaves y frescos (eucalipto, melón, vainilla o jazmín, por ejemplo).
- La habitación: lo mejor son las velas pequeñas, ya sean planas, en forma de bola o cilíndricas. Los colores más adecuados son los rojos, verdes o azules de tonos algo más vivos que los del salón. En cuanto al olor, puede ser cualquier aroma que ayude a relajarte (fresa, lluvia de verano, selva tropical...).
- La cocina: vuelve a ser recomendable el uso de velas de pequeño tamaño, además de emplearlas colocadas en algún portavelas que evite que nos quememos al rozarlas cuando estamos preparando la comida. Los colores, mejor discretos, tonos pastel o tostados (amarillo, tierra, café...) y los olores pueden ser cítricos (limón, naranja, piña...) o dulces (fresa, vainilla, café y chocolate, canela), siempre muy relacionados con la comida.
Velas flotantes y flores. |
- Cuarto de baño: el tamaño dependerá en gran medida de la amplitud del WC. Los colores más comunes son los más relacionados con la limpieza o frescura (el blanco o el azul) y sus olores tienden a la frescura (lavanda, olores con inspiraciones tropicales o marinos).
En cualquiera de las estancias, si queremos potenciar la iluminación de la vela y, a la vez, dotar de amplitud a la estancia, existe un sencillo truco: coloca como base de la vela un pequeño espejo (cuadrado o redondo).
Velas de LED. |
Hoy en día existen muchas variedades de velas como hemos comentado con anterioridad, velas que flotan, he incluso velas que no se gastan, velas que no se consumen, es una de las ultimas novedades que podemos encontrar en el mundo de la iluminación con velas. Esto es posible gracias a las velas LED, son velas algunas hechas con cera natural, otras imitan a la cera, pero lo que tienen en común todas, es que no hace falta encenderlas con un mechero como las velas normales, estas se encienden con un interruptor, porque la luz que proporcionan es gracias a los LED. Gracias a esto las velas siempre estarán como nuevas y listas para usarse en cualquier momento. Lo único que le faltan a estas velas es que sean perfumadas.
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